SUMA Y RESTA

En la previa era un partido en donde ninguno podía resignar chances. En donde la victoria podía ser lo único que los mantuviera con vida. Platense y Belgrano ofrecieron un emotivo partido y pese a que no hubo goles, el encuentro fue vibrante, con situaciones muy claras para ambos lados.
¿A qué equipo le cayó mejor la igualdad? Indudablemente que a Belgrano porque pudo achicar un punto más el margen que lo separa de la promoción, pese a que las estadísticas también marquen que retrocedió una posición.
La iniciativa fue del “Calamar” que por intermedio de Brain Robert y Emiliano Romero, se encargó de ponerle un manto de dudas al fondo celeste, sobre todo al lado derecho cuando Diego Nadaya se enfrentó a Martín Pautasso y le ganó el duelo toda la mañana.
Platense no dejó pensar a Belgrano en los primeros 10’, en donde Diego Ceballos de cabeza y luego de aire en una acción que tuvo tres veces chances de gol y que se perdió por poco. Había que ver cómo iba a reaccionar Belgrano sin Pablo Chavarría.
Pero el celeste se despertó: a los 12’ César Pereyra desparramó a Walter Zunino y dejo sólo con el arquero al grandote Osvaldo Miranda y su disparo se fue arriba. Increíble. En la contra un centro de Nadaya que Romero por poco no convierte en el 1-0. Treinta segundos después, el “Picante” perdonó la vida. El ex Unión se volvió una pesadilla para la defensa local, aunque no encontró en Miranda al socio ideal. El juego se equilibró. Platense quería con Robert y Belgrano oponía la marca de Guillermo Farré, las subidas de Juan Maldonado y la peligrosidad de Pereyra.
Franco Vázquez, contenido a la derecha, cuando se despegaba de esa posición era un arma más. Así habilitó a Pereyra, quien resolvió mal una chance de gol.
Había un ida y vuelta permanente. A los 29’ Nadaya pudo otra vez con Pautasso, su centro fue capitalizado por Robert, quien le pegó al arco, el balón rebotó en Pier Barrios y su rebote le quedó a Ceballos, era gol pero el ex Talleres, con Juan Olave volviendo, le acertó a la marca de Pautasso.
Después quedó tiempo para un disparo de media distancia de Farré y otro de Ceballos, aunque la mala noticia fue la lesión de Maldonado, quien en un pique sintió un “pinchazo” y le dejó su lugar a Martín Andrizzi.
En el inicio del complemento, Miranda demoró una eternidad para rematar al gol y Alejandro Sánchez le adivinó la intención. El partido no decayó. Un error haría pagar los platos rotos, pues el que acertaba iba a ganar.
Vázquez ya fue por el medio y Alberto Pascutti mandó otro delantero a la cancha.
A los 12’ Pereyra le hizo besar el poste a una pelota y Pautasso, después de cometer una innecesaria falta de frente al marco, casi se redime en la jugada siguiente.
A los 24’ el remate de Nadaya tenía destino de red pero Olave sacó al córner y sobre los 34’ el “Picante” tiró un “zapallazo” y el balón casi se mete.
A la cancha Mansanelli, a la cancha Cuevas, pero ya nada iba a cambiar. Los nervios de perder hicieron que al final ninguno quisiera arriesgar, aunque dio la sensación de que hubo un claro penal no cobrado a Andrizzi.
Nada por aquí, nada por allá. Fue cero a cero dentro de un vibrante cotejo, cuyo resultado a grandes rasgos le sabe mejor a Belgrano, aunque no tanto.